Ica no estaría preparada para afrontar nuevamente un terremoto

Sector salud aún cuenta con carencias después de 11 años del nefasto terremoto

Han pasado 11 años desde que un gran movimiento sísmico, de 7.9 grados en la escala de Richter, destruyó gran parte de la costa central del Perú. El nefasto sismó acabó con la vida de 597 personas, más de 2200 heridos, 76 mil viviendas completamente destruidas, y dejó brechas que no se han llegado a reparar hasta el momento.

El movimiento telúrico dejó inhabitables a hospitales, escuelas, iglesias, municipios, estadios, carreteras y puentes, que dejaron en escombros principalmente a la región Ica. Algunos de estos establecimientos lograron ser reconstruidos, pero otros como los del sector salud, no se han terminado completamente.

La Dra. Julia Neira Goyeneche, Decana del Consejo Regional IX Ica, relata que, luego del terremoto que azotó dicha región, los médicos tuvieron que levantar carpas y solicitar apoyo a otras instituciones para atender a los pobladores que necesitaban atención de emergencia. “Acudimos a la atención en ese momento, teníamos incubadoras a la intemperie que tapábamos con frazadas, y atendíamos a los pacientes a pesar de tener a nuestras familias devastadas”.

“Estuvimos alojados en un hospital de campaña con medidas de bioseguridad pésimas por 7 años. Después de las exigencias y el sacrificio continuo de los médicos, se logró abrir el nuevo Hospital Regional de Ica y el Hospital Santa María del Socorro, pero se adolece de equipos y medicamentos para la atención básica de nuestros pacientes”, agregó.

La Dra. Neira resaltó su agradecimiento a los galenos identificados con el desarrollo de la salud en la región y la gran lucha que tuvieron que asumir desde el año 2007. “He visto médicos que han sacado dinero del bolsillo para apoyar con medicamentos a personas que se han quedado sin nada, pero es necesario recordar a las autoridades que ésta es su labor y que urge resolver los problemas que han quedado pendientes en la región”, agregó.

El Dr. Raúl Urquizo Aréstegui, Decano del Consejo Regional III Lima, exhortó al Estado trabajar por el fortalecimiento de los equipos de emergencia en todo el país y sobre todo en las regiones altamente sísmicas. “Al igual que en todo el país, la mayoría de establecimientos de salud en Lima Metropolitana no están preparados para afrontar la alta demanda en salud posterior a un terremoto. Si los hospitales no cuentan con un debido equipamiento y personal para atender en un día común, mucho menos estarán preparados para catástrofes de esa magnitud”, culminó.