Mejoremos la bioseguridad en los establecimientos de salud

Perú es uno de los países que lidera la mayor tasa de TBC en Sudamérica

En la mayoría de los casos las infecciones intrahospitalarias se dan por el uso inadecuado de medidas de seguridad. Esta problemática se ha demostrado en múltiples oportunidades; al llegar a un establecimiento de salud notamos la carencia de implementos de seguridad básicos. Un médico está en constante interacción con sus pacientes, expuesto a diversas enfermedades.

Debido a la carencia de implementos de seguridad, no se cumplen las medidas de protección y prevención. De otro lado, en el sector privado se suelen reducir los gastos para garantizar rentabilidades altas.

Evidentemente no se cumple la norma de salud ocupacional y de seguridad de salud para el trabajo que señala que el empleador debe proporcionar los elementos de seguridad necesarios. Esto es algo que no se da ni en el sector público ni en el privado.

“Es bastante claro que tanto el Minsa y EsSalud no están cumpliendo de manera completa y correcta sus obligaciones. En el caso de las mascarillas N95, implementos de filtrado básico para la protección del personal de la salud, esperan que tenga una duración de 2 meses, conociendo que una mascarilla no debería tener un uso superior a 1 mes, incluso se recomienda su uso por un aproximado de 15 días” acotó el Dr. José Layten del CMP-Lima.

El Dr. Raúl Urquizo Aréstegui, Decano del Colegio Médico de Lima, se manifestó ante esta preocupante situación y exigió al Minsa, respetar el presupuesto anual que bordea los 10 millones de dólares, para la prevención y control de la tuberculosis. Indicó que esto debería incluir la protección de todo el personal médico contra esta contagiosa enfermedad, ya que Perú es uno de los países que lidera la mayor tasa de TBC en Sudamérica.