Hospital Marino Molina debería ser declarado en emergencia

“Esto responde a la mala gestión de autoridades que no conocen la realidad de los hospitales”

Debido a una ineficiente gestión, el Hospital Marino Molina de EsSalud, del Distrito de Comas, se encuentra al borde del colapso. La población adscrita a dicho establecimiento se ha incrementado en número que cuadruplica su capacidad inicial, llegando a atender hasta más de 400 mil asegurados. La infraestructura no se ha mejorado y el número de profesionales no se ha incrementado en relación a la demanda  de la población.

Origen del problema

La situación no es reciente, pero se agudizó mucho más en los últimos meses. El cierre de las distintas Instituciones Prestadoras de Servicios de salud (IPRESS), que tenían convenio con EsSalud, ha provocado que la población de dichos establecimientos, uno de ellos inclusive ubicado en el distrito de San Martin de Porres, sean asignados a una UBAP  (Unidad Básica de Atención Primaria) de creación reciente denominada “El Retablo”; ésta desde el inicio fue rebasada por la sobrecarga de asegurados adscritos, colapsando de inmediato; tras ello, los pacientes insatisfechos acuden masivamente a la emergencia del Hospital Marino Molina, produciendo el colapso de esta también.

El Dr. Hugo Urbina Cotrina, presidente del Cuerpo Médico del Hospital Marino Molina de Comas, exige una urgente reestructuración en EsSalud. “Una medida para iniciar la corrección de esta situación, es realizar un cambio total de funcionarios que han demostrado ineptitud e inacción, llevado esta situación al límite. Implementar una política de repotenciación de nuestro hospital elevándolo de nivel, mejorando la infraestructura, dotación de medicinas e insumos médicos, y contratación de mayor número de personal de salud como medida inmediata; y prever a mediano plazo la construcción de otro hospital del Seguro Social en el cono norte “, indicó.

Posición de los médicos

Los médicos relatan que día tras día, los pacientes desfogan su ira y desesperación contra el personal de salud, sin conocer el verdadero origen del problema. “Nuestra mayor satisfacción es solucionar los problemas de salud de la población, que entiendan que nosotros salimos en defensa de ellos, pero que la situación es caótica. A su vez pedimos que tomen conciencia que somos seres humanos y escapa de nuestras manos trabajar bajo esta situación”, agregó el Dr. Urbina.

“Hemos asumido el cargo el 30 de abril y desde ese momento venimos emprendiendo una lucha frontal para salvar el hospital. Nuestro primer paso fue exigir el nombramiento de un nuevo director, comprometido en la reestructuración de nuestro establecimiento.  Con el apoyo de nuestro Colegio Médico y del Sindicato Nacional de Médicos del Seguro Social de Perú (Sinamssop) esperamos corregir esta situación en bienestar de la población”, agregó el médico.